Saturday, July 18, 2020

Cambios de la Cuarentena en nuestra familia, el invitado que llegó sin aviso II parte



Cuando se declaró cuarentena acá en Miami, a mediados de marzo 2020, decidimos empezar hacer proyectos que habían sido postergados por falta de tiempo, así que Franco con Elías empezaron a trabajar en cuero, fabricaron un estuche para un teléfono de Franco, un cinturón hermoso para Elías, una pulsera muy linda para mí, etc.


En esa fecha nuestra gatita Puntita estaba por dar a luz. Esa historia la conté con más detalles en mi publicación anterior. Sus gatitos nacieron el 30 de marzo. Ella se muere a mediados de abril, y nuestros hijos se abocaron al cuidado y la ayuda para que pudieran sobrevivir esos gatitos, que también han venido a ser una gran bendición para toda nuestra familia. La cuarentena se transformó en una bendición para ellos también, pues han podido tener todos los cuidados requeridos, la inmensa atención y cariño de toda nuestra familia porque todos hemos pasado más tiempo encerrados.
Llegaron justo a tiempo, para distraernos de todos los cambios que estábamos viviendo. Y aún lo siguen siendo. Nuestras hijas se han podido ir turnando en quedarse en casa, a cargo de ellos, la cocina, limpieza, lavado de ropa, etc. Ha sido una gran experiencia y una tremenda ayuda. Recordemos que en este país es común que la familia se divide las labores de la casa, y eso no cambió, pero si cambió que nosotros empezamos a trabajar muchas horas extras y nosotros podíamos venir a almorzar con todo listo, servido, ropa lavada, etc. ¡¡Qué lindo ha sido eso, bravo por mis super hijos!!
En mi caso, estaba a punto de comenzar un curso para dueños de empresas, parecido y aún mejor que el que había terminado el año pasado. Con la pandemia se fue postergando y postergando el inicio, hasta que llegó el momento que lo suspendieron porque no estuvieron dispuestos a hacerlo online. Pero tuve la bendición que uno de los organizadores que había sido mi consultor en el programa anterior, decidió, comenzar un programa diferente, pero propio, con todos los que nos quedamos esperando. El curso anterior y el de ahora han sido cruciales para poder lograr que nuestra empresa pudiera hacer los cambios necesarios para enfrentar esta pandemia. Wow, ¡esto sí que Dios sabía cuánto lo necesitaríamos! Por eso no puedo estar más agradecida del Señor y recordar que estamos guardados y cuidados por Él, aunque no conozcamos el futuro, Él sí lo conoce, tal y como dice la Biblia en Romanos 8:28:Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.”
En cada una de las situaciones que les estoy relatando, hemos podido ver que todo lo malo se ha tornado para nuestra bendición.
En el caso de nuestra empresa, recordemos como mencioné antes que aunque pareciera que estábamos privilegiados por ser un negocio esencial, no fue así, pues no estábamos recibiendo abastecimiento desde China, tampoco era fácil encontrar desde otros países, por el transporte y el cierre de muchos países y fábricas. Por ejemplo; Malasia que fabrica la mayoría de los guantes médicos del mundo, también tenían la pandemia y cerraron por mucho tiempo, hasta el punto que retrasaron la fabricación de  guantes para los próximos años en el mundo. Nosotros somos una empresa de 96% de exportación, por lo tanto, tampoco tenemos un local de venta al detalle y había restricción de trabajar con más personal. Por otro lado, nuestras hijas sin trabajo y Elías con Rayén sin clases presenciales. Todos estos obstáculos para nuestro Dios fueron nada.
¿Cómo operó Dios en todo esto que pudo haber sido un desastre?

       - Al fin llegó la ayuda monetaria del gobierno dio para cada persona en forma automática. Aunque a nosotros nos tocó esperar de los últimos, a fines de mayo, cuando creíamos que ya no nos llegaba.
      - Nosotros ya no seguimos organizando estudios bíblicos ni reuniones de oración, pues muchas iglesias y ministerios empezaron a tener servicios y reuniones online. Entonces pudimos empezar a participar incluso de reuniones especiales de iglesias en Chile. Una linda experiencia fue en Talca con el Pastor Hugo que nos permitió invitar a nuestro querido pastor Orville Swindoll, que ha sido nuestro mentor por muchos años, para que llevara un mensaje a las familias y después una segunda reunión que nos permitió trabajar una serie de preguntas de nuestras experiencias con él en el ministerio de matrimonios y familias. Cada domingo empezamos a conectarnos a nuestras iglesias, pudiendo participar de los estudios bíblicos y de los servicios en inglés y español, de nuestras 2 iglesias, en las que participamos.
      - Aisha comenzó a trabajar online (de voluntaria) con el ministerio en la Florida y pronto pudo empezar a conectarse con los grupos de Chile, en las reuniones de obreros en la capital y en las reuniones de directiva de los grupos locales. Comenzó a hacer entrenamiento en algunas áreas en tecnología y la empezaron a invitar a hacer estudios bíblicos, hasta el día de hoy. Empezó a tomar clases de teología y ha tenido varias participaciones como obrera del ministerio en eventos acá en USA, simultáneamente en Chile y en USA con un solo clic, algo que nunca hubiéramos imaginado. Ha podido participar de varios entrenamientos y retiros, incluso algunos internacionales, pero online, obvio. Y además logró juntar un dinero con lo cual la hizo merecedora de obtener un grant/beca especial, un dinero que se une al monto que está reuniendo para irse de misionera por 2 años a Chile. También ha seguido trabajando con nosotros en la empresa entre medio de todo su horario bien ocupado. Ella es muy preparada obviamente en contabilidad, pero tiene un extra fuera de serie, en documentación, aplicaciones, certificaciones, página web, fotografía, publicidad, etc.
    -  Rayén por primera vez había tomado clases online, casi todo su semestre había “coincidido” que no eran clases presenciales, algunas que eran hibridas (presenciales y online), justo ya habían terminado la parte presencial. Así que el Señor ya había previsto esto, sin ella haberlo notado al inicio, después todos pudimos dar gracias al Señor, pues no hubo gran impacto en sus clases con el cambio de la pandemia. Hasta el grupo de estudio bíblico de ellos en InterVarsity, por primera vez estaban probando de hacerlo online, yo le había sugerido a Rayén que lo hicieran como a modo de prueba, ya que todos estaban complicados en poder reunirse, debido a la distancia y porque muchos no estarían en campus en los horarios que sí podían. Pero nunca nos imaginamos lo que vendría y que esto serviría para mantener continuidad y ha sido de tremenda bendición, pues de ahí salió un club de lectura, que ya terminaron un libro y ahora que van por el segundo libro, ha sido un éxito, agregándoseles muchos estudiantes, incluso algunos nuevos que ellos no conocen. Hasta pudieron hacer un retiro online, que fue de gran bendición y apoyo emocional para Rayén y los demás jóvenes. Y aunque Rayén perdió su trabajo en la universidad, al poco tiempo la volvieron a recontratar, aunque aún no han empezado, pero es una esperanza a futuro de que aún mantiene su trabajo. Ella pudo terminar muy bien su semestre con muy buenas notas. Además, justo estaba terminando su práctica de trabajo, así que de inmediato se unió a trabajar en nuestra empresa, ayudar con la casa y gatitos. Para nosotros un sueño, pues ella es una experta en publicidad, página web, imágenes, fotografía, diseño gráfico, etc.
     - Elías pudo terminar su año escolar online, gracias a Dios la cuarentena empezó a mediados de marzo, y las vacaciones de verano empezaban la primera semana de junio. Los colegios acá estaban muy bien preparados, con muchas clases y tecnología online, hasta pudo terminar con sus clases de banda, pues practicaban y aprendían por zoom, y luego mandaban sus tareas en videos. El álgebra lo estudiábamos juntos con unos programas maravillosos que les dieron, eran mejores que las clases que hacía su profesora con la cual veníamos teniendo problemas, así que le funcionó para mejor. O sea, todo se transformó para bendición. ¡Una vez que terminaron sus clases, él ha venido a ser el empleado número uno! Él ya sabía y ya nos estaba ayudando con algunas labores básicas, como les hemos ido enseñando desde chicos a todos nuestros hijos, pero ahora que además se había crecido hasta incluso pasar la altura del papá, hasta podía ayudar en la bodega, con cajas, empaque, recibimiento de mercadería, contarla, verificarla, documentación, y en toda la transformación de nuestra empresa él y nuestras hijas han sido piezas fundamentales. Han traído una visión nueva en cuanto al uso de tecnología, nuevos softwares que facilitan el trabajo, ideas en nuevos productos que podíamos introducir, los cuales empezaron a ser todo un éxito, como lo es toda la línea de desinfección con Ultravioleta que trajimos. Nos empezó ayudar incluso en ventas locales, videos, publicidad, afiches, etc. ¡¡Increíble!!

Sunday, July 12, 2020

El Coronavirus un invitado sin aviso, que llegó para quedarse y cambiar nuestras vidas.



Para ser sincera, en un principio no me afectó demasiado, solo en forma lejana, me dio tristeza por China que otra vez les alcanzara un nuevo virus. Luego cuando se fue esparciendo por Italia y España, parecía un virus enviado apropósito, eso ya me empezó a parecer medio raro. Poco a poco me fue preocupando, cuanta gente empezaba a morir, los miles de cajones por día, las fosas comunes me hacían recordar las fosas comunes del pasado de holocaustos como el de los judíos y la dictadura en Chile. En el caso de nuestra empresa empezábamos a sufrir la escasez de productos médicos. Llegó un momento que ya no podíamos comprar de China, nuestros propios suplidores estaban desabastecidos. Comenzábamos a notar la magnitud de esta restricción. Mucha gente aquí mismo en Estados Unidos desconocían cuanto dependemos de China, desde la ropa, a un mueble, un auto, y muchas de las cosas que usamos a diario. Varios nos preguntaban si nuestras mascarillas eran realmente estadounidenses, nos daba tristeza decirles, que el mismo teléfono que estaban ocupando, el TV donde miraban sus noticias, el reloj en su mano, todo, todo venía de China. En medio de esto estábamos ya en marzo, aún no se llamaba a Cuarentena, cuando mi cuñada, la esposa de mi hermano menor empieza a sentir malestares, sin ni siquiera sospechar que podía ser este virus Covid-19. Luego comienzan a rumorear que el virus ha llegado a la Florida. Miami Beach estaba recibiendo a varios cruceros que estaban vagando en el océano sin ser recibidos en ninguna parte, muchos venían enfermos, muchos otros contagiados. En los aeropuertos no chequeaban a nadie, no había restricción alguna para turistas y viajeros, y nosotros no podíamos comprar de China.

Tuve miedo, le pregunté a Franco, ¿Qué haremos si tenemos que cerrar, de qué viviremos?, ¿Que haremos si nuestro sustento viene solo de nuestra empresa y tocara cerrar?, ¿Qué pasaría si ninguno de nosotros podría ni siquiera buscar trabajo?, Rayén perdería el de ella, ¿Qué pasaría con sus estudios?, Aisha, ¿Qué pasaría con ella que tenía planes de irse a Chile?, ¿Cómo podrá seguir levantando fondos? Y si lograra terminar su recaudación, ¿Cómo podrá ir a Chile si se cierran las fronteras?, y Elías ¿Qué pasaría con sus clases?, ¿Qué pasaría con aquellos que se graduaban este año en mayo y junio?, ¿Cuánto durará todo esto?, ¿Qué pasará con aquellos que tenían fecha de matrimonio estos mismos días?, ¿O aquellos que andaban paseando? Franco me dijo debemos confiar en el Señor. Todas estas preguntas las llevé al Señor, pues día a día, me venían más preguntas, y sentí que debíamos hacer reuniones de oración, cuando ya nos pidieron que nos quedáramos en casa y los negocios e iglesias cerraran. El Señor puso en mi corazón hacer reuniones online, e invitar a quienes quisieran unirse para un estudio bíblico, alabanzas y oración. Franco y mis hijos me apoyaron en esta iniciativa, yo sentía que yo lo necesitaba urgente para no desmayar. En ese tiempo aún no sabíamos de nadie que lo hiciera, aún no empezaban las reuniones en Zoom, ni Hang Out. Esto fue crucial en mi vida, me vino esperanza, algunas amistades y familiares se unieron, desde diferentes ciudades y países, incluyendo a mis papás y mi hermano con su familia en Chile. Todos estábamos en un mismo sentir, debíamos orar, debíamos unirnos, alabar al Señor era lo que debíamos hacer. En una de esas reuniones mi hermano me confirma que su esposa estaba muy mal, que estaba con todos los síntomas del Coronavirus, y que por eso no se uniría a la reunión esa noche, pues no se sentía bien. Nos dio mucha tristeza y oramos todos ahí, por ella y otros casos que empezaban a aparecer, otra amiga había perdido su trabajo, y así empezaban aparecer las primeras secuelas de este invitado no esperado, pero que había llegado a nuestras vidas, para transformarlo todo.


Estuvimos llamando a mi cuñada, orando por ella, y viendo que de a poco estaba saliendo adelante. Unos días después, mi cuñada nos llama para avisarnos que mi hermano había adquirido el virus y que estaba muy, pero muy mal. Ahí me vino mucho más temor, ellos habían venido en Nov-Dic del 2019, nunca lo habían hecho antes, y esas semanas se habían convertido en un retiro espiritual para todos. Llegó a estar tan mal, que pensé y le pregunté al Señor si su propósito había sido traerlo para despedirse de todos nosotros. Tuve mucho miedo, lloraba mucho, pidiéndole al Señor que por favor cambiara sus planes si era necesario, que lo sanara, que lo tocara con su mano poderosa de sanidad. Orábamos todos los días, pedimos como petición por él en todos nuestros grupos de oración, a varias iglesias que amamos, lo llamábamos todos los días y orábamos por ellos, les mandamos una vitaminas especiales para ayudarles a fortalecer su sistema inmune, le pedimos que tomara muchos tés calientes, que comiera ciertos alimentos que levantaría su sistema inmune, etc., todo cuanto averiguábamos les avisábamos, hasta que llegó un día que había empeorado, casi se había muerto la noche anterior, sintió que ya no podía respirar, no había querido ir al hospital, por miedo a morir allá solo, sin poder ser visitado, y como mi cuñada se había empezado a recuperar, ella le pidió que aguantara lo más que pudiera, que lo lograría. Yo tuve mis dudas frente a estas decisiones, pero cuando oré con ellos pidiendo que el Señor les guiara en sus decisiones, eso trajo paz a mi corazón, pude descansar y saber que el Señor estaba en control. Al día siguiente se sorprendió de volver a despertar, y darse cuenta que aún estaba vivo, el Señor puso en mi corazón ungirlo con aceite, como solemos hacerlo con los enfermos, pero mi pregunta al Señor fue; ¿cómo podremos hacerlo online y a distancia?, el Señor me guió a pedirle a Franco que lo hiciera como diácono, que leyéramos el pasaje de Santiago 5:14-16 Reina-Valera 1960 (RVR1960)


“14 ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. 15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados. 16 Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.”

Y que les guiáramos para que se ungieran uno al otro, y nosotros oramos por ellos. A la mañana siguiente nos dijo que por primera vez en todo este tiempo se sentía tan bien, que había tenido una tremenda mejora en sus dolores, que hasta el hambre le había vuelto, todo eso eran tan buenos síntomas, ¡qué alegría! Gracias Señor por tu respuesta, que maravilloso es tener a una Papá así, todopoderoso, que escucha nuestras oraciones y no se demora en venir a nuestra ayuda cuando lo necesitamos urgente.

Bueno en todo cuanto ocurría empezamos a ver muchos milagros. Mi hermano se sanó por completo, sus hijos y esposa también. 4 amigos de ellos estuvieron gravísimos en el hospital con ventiladores, una era la amiga que había contagiado a mi cuñada, otros eran un matrimonio cristiano que había tenido que dejar solos a sus hijos en casa cuando se fueron de urgencia, ahí mi hermano pudo ser de bendición, pues nadie que no hubiera sido contagiado y recuperado podría haber corrido en esos momentos a buscar a esos niños, y llevarlos con él. Empezábamos a entender que todo se iba tornando con un propósito. Estos otros amigos no habían tenido contacto con mi hermano, ni su familia, pero en mi ciudad de origen, donde viven todos ellos, las autoridades habían llegado todos contagiados, y muchas personas venían enfermas de sus viajes por Europa. Empezamos campañas de oración por esos 4 amigos, y después, de más de 1 mes todos se recuperaron, hasta en el diario local entrevistaron a uno de ellos, pues realmente era un milagro.

En nuestro caso nos dimos cuenta de que podíamos seguir trabajando y abriendo el local, pues éramos un negocio esencial para suplir productos para este virus. Aunque nos pararon las exportaciones de productos esenciales de Covid19. Nuevamente nos vimos preocupados, pues nuestro negocio es 96% exportación, tampoco podíamos pagar propaganda en ningún medio, automáticamente nos borraban y nos decían que no nos recibirían los avisos, por prioridad de protección contra del Coronavirus en nuestro país, pues USA se había cerrado para guardar todo solo para nosotros, dejando olvidados a las islas del Caribe que casi dependen completamente de USA para cumplir sus necesidades, a ratos nos sentimos tan traicioneros de tener que responder a nuestros clientes de América Latina y el Caribe que no podíamos vender nada para la emergencia, que tristeza más grande. Una vez más nuestro panorama se veía sin luz, pues medio desabastecidos, sin productos de China y ahora esto que en los puertos y lugares de embarque paraban las cargas y las confiscaban. Era una nueva razón para confiar y alabar al Señor, volver a sentir el gozo de mi hermano y su familia recuperada, eran tantos milagros ¿Cómo este mismo Dios no podría sustentarnos y proveernos?


Así fue que tuvimos que reinventarnos y convertirnos en una empresa de venta local. NO teníamos un local preparado para eso, pues nuestras oficinas y dependencias están preparadas para solo trabajar online con nuestros clientes en el extranjero. Pero gracias a las nuevas restricciones, las empresas no podían dejar entrar a muchos clientes. Entonces nos sirvió poder recibir las órdenes por teléfono y llevábamos las ordenes a los autos de nuestros clientes, todos protegidos, así no necesitaban entrar a nuestro local. Nuestras estrategias venían totalmente renovadas de parte de Dios, lo que nunca antes hicimos, lo fuimos implementando ahora. Llenamos de propaganda local por todos lados, carteles en las calles, en los autos en nuestras ventanas, etc.
(Continuara...)